El olor, sin duda, juega un papel importante en la vida de una persona. Puede volvernos simpáticos o antipáticos, sin pensar en las circunstancias. Un olor desagradable de la boca puede complicar la vida de una persona: tanto en el ámbito laboral, como en la vida personal.
Todo esto va acompañado del estrés y de los miles de problemas que provoca. Muchas personas que se quejan de mal aliento evitan incluso hablar con su médico y tratan de resolver el problema por sí mismo, pero a menudo solo logran disimular el olor por un tiempo.
En realidad, el problema puede ser resuelto por un especialista que pueda determinar con precisión la causa del olor y prescribir el tratamiento adecuado al paciente. Debemos recordar que la causa del mal aliento no son solo las patologías dentales y con una correcta higiene bucal no siempre podemos deshacernos de él.
¿Qué tan común es mal aliento?
El mal aliento o halitosis es un problema médico y social muy importante. La mayoría (85-90%) del mal aliento están causados por la boca. En particular, los microorganismos que anidan aquí.
Alrededor de 600 especies de microorganismos se encuentran en la cavidad oral y la mayoría de ellos se localizan en la superficie posterior de la lengua. Esta parte de la lengua está relativamente seca y mal limpiada, que es la mejor condición para que las bacterias se multipliquen.
La mayoría de las bacterias en la boca tienen la capacidad de descomponer las proteínas de los alimentos y producir sustancias que contienen azufre, los aminoácidos. La microflora bucal suele estar habitada por microorganismos grampositivos, pero en condiciones especiales, como secreción reducida de saliva, enfermedad de las encías y mala higiene bucal, el equilibrio de la microflora bucal se altera a favor de los microorganismos gramnegativos.
Son los microorganismos anaerobios gramnegativos los que están asociados con la producción de sustancias que contienen azufre en la cavidad oral, lo que eventualmente se acompaña de mal olor. Sin embargo, otras sustancias que no contienen azufre (cadaverina, acetona, acetaldehído) también pueden provocar malos olores.
A parte de los problemas provocados por la misma boca, hay muchas causas que puedan provocar mal aliento. Algunas de ellas son: alimentos, tabaco, mala higiene bucal, boca seca, medicamentos, infecciones,… u otras afecciones de la boca, la nariz o la garganta, entre otras causas.